David Gibson. Imágenes de un diario
David Gibson. Imágenes de un diario
Por David Tijero.
Colaborador del BasqueDokFetival
Imágenes Ana Ruiz
Los talleres que el fotógrafo británico David Gibson ha llevado a cabo en Bilbao y Gasteiz el pasado mes de marzo han sido el punto de partida para dar inicio a una larga lista de actividades organizadas dentro del Basque Dok Festival. En esta entrevista sabremos más sobre la obra de uno de los grandes de la fotografía de calle de las últimas décadas.
¿Recuerdas cuál fue tu primera fotografía y con qué cámara la hiciste?
Supongo que la hice cuando era un niño. Sí recuerdo que tenía una Kodak Instamatic con la que fotografiaba pero no recuerdo exactamente cuál fue la primera fotografía que tomé… tampoco creo que hiciera ninguna foto significativa por aquel entonces como para recodarla.
¿Hubo un momento crucial en tu vida en el que decidiste convertirte en fotógrafo a tiempo completo o fue más bien un proceso paulatino hasta llegar a convertirte en fotógrafo profesional?
No, en realidad no hubo ningún momento decisivo. Me ha gustado viajar desde siempre y siempre he llevado una cámara conmigo en mis viajes. Fue un proceso muy lento y largo hasta verme a mí mismo como alguien que se ganara la vida como fotógrafo. Esto sucedió hacia el final de la década de los noventa.
«No veo grandes diferencias a la hora de fotografiar en uno u otro sitio, pero sí que mi motivación aumenta al llegar a un lugar nuevo.»
Tu lugar principal de trabajo a la hora de hacer fotografía de calle son principalmente las calles de Londres, una gran ciudad. ¿Has encontrado diferencias reseñables durante los días en que has recorrido las calles de ciudades pequeñas como son Bilbao o Vitoria?
Londres es el lugar donde vivo y es por ello que fotografío más allí que en otros lugares, pero siento que me motiva mucho el estar en un lugar nuevo en donde nunca he fotografiado antes. No veo grandes diferencias a la hora de fotografiar en uno u otro sitio, pero sí que mi motivación aumenta al llegar a un lugar nuevo.
¿Y es más sencillo fotografiar en un lugar conocido en donde conoces las calles, la luz, las sombras… o la emoción de visitar por primera vez un lugar sirve como para inspiración y ayuda a hacer buena fotografía?
Quizás me siento más inspirado al visitar un lugar en el que nunca he estado. Supongo que saber que tengo una cantidad limitada de tiempo en el que voy a estar allí me hace tener un sentido de la urgencia y ser menos perezoso. La motivación aumenta y me hace caminar más. No creo que un lugar conocido me resulte más fácil de fotografiar. Es más bien una cuestión interior mía que me hace tener más ganas de fotografiar en un lugar nuevo.
¿Qué habilidad consideras más importante a la hora de hacer foto de calle, la paciencia, la concentración, la constancia… todas ellas, alguna otra?
Creo que se trata de la motivación que tengas por encima de todo. Motivado para hacer algo que supone un esfuerzo. Es algo mental. Es según cómo te sientes en ese momento. Es sencillo ir por ahí paseando y haciendo fotos sin más, pero alcanzar ese punto de concentración en el que llegan las buenas fotografías ya es algo más complicado.
«Suelo referirme a las fotografías que hago como una especie de diario en el que voy documentando lo que veo cada día.»
¿Te sientes cómodo cuando la gente habla sobre ti y dice, «David Gibson, fotógrafo de calle»? ¿No es una definición al menos incompleta al referirse a tu trabajo como fotógrafo?
No me siento incómodo con esa definición. Aunque no estoy seguro de si es totalmente correcta. Es lo que hago, sí, pero lo encuentro un poco limitado para definir mi trabajo pues hago otras cosas que no tienen que ver mucho con la fotografía de calle. Yo considero que simplemente hago fotos. Suelo referirme a las fotografías que hago como una especie de diario en el que voy documentando lo que veo cada día. Se trata simplemente de ver y de, de alguna manera, presionarme a mí mismo para fotografiar.
Existe un encendido debate en torno a la fotografía de calle. Los hay que piensan que no es más que documentar un lugar y un tiempo, otros, en cambio, piensan que debería encuadrarse en cierto modo, dentro de alguna categoría artística. ¿Cuál es tu opinión al respecto?
Probablemente ambas partes tienen razón. Por un lado se trata de mirar, de reflejar un momento y un lugar, de crear con ello una especie de diario, pero por el otro hay también una expresión artística en la forma en que se documenta.
Alguna de tus fotografías más conocidas aparecen llenas de humor, describiendo situaciones algo surrealistas o escenas divertidas, ¿es lo más complicado de conseguir por medio de una imagen? ¿Hacer que la gente sonría al verlas?
No creo que sea especialmente difícil hacer una imagen que haga que la gente se ría, quizás es de las cosas que más fáciles me resultan. No estoy seguro de si la gente en general recuerda especialmente mis fotografías como imágenes divertidas, puede que sí, que haya algo de humor en ellas. Más que divertidas las consideraría que representan situaciones curiosas o humorísticas.
«Cuando veo mis fotos más antiguas veo que me he vuelto más exigente conmigo mismo a la hora de fotografiar.»
Cuentas con una larga trayectoria profesional dentro del mundo de la fotografía, ¿percibes algún tipo de evolución en tu estilo o en los temas sobre los que fotografías?
Quizás algún otro podría observarlo con más facilidad que yo, pero sí, supongo que definitivamente sí que ha habido cambios desde mis primeras fotos en blanco y negro. Cuando veo mis fotos más antiguas veo que me he vuelto más exigente conmigo mismo a la hora de fotografiar. En los últimos cinco, diez años he vuelto a estudiar fotografía de nuevo, a ver autores y a escribir sobre ello, bastante más ahora que cuando comencé y ya sabes, cuanto más sabes de algo mayor presión pones sobre ti a la hora de hacerlo y es por ello que a veces me siento defraudado conmigo mismo.
¿Cómo viviste la transición de utilizar carrete a las cámaras digitales? ¿Fue un paso difícil o te resististe de alguna manera al cambio?
Es mucho más sencillo ahora, sí. Fue cuestión de adaptarse a lo que venía y sí, vería muy difícil volver a utilizar película. No es algo que eche de menos, simplemente es que es mucho más fácil trabajar con digital.
«Es posible hacer buenas fotos con un teléfono móvil, pero las bases de la fotografía, saber enfocar, la composición, siguen siendo las mismas.»
¿Podrías nombrar algún fotógrafo de calle emergente que todo aquel interesado en este género debería seguir?
Es difícil dar nombres sin dejar fuera a otros igual de importantes. Hay muchos fotógrafos haciendo grandes cosas. Mi consejo es que sigan a los miembros del colectivo In-Public. Hay gente muy buena ahí dentro.
Las redes sociales y las nuevas tecnologías han cambiado muchos aspectos de nuestra vida y la fotografía no ha sido una excepción, ¿Cómo ves el futuro de la fotografía de calle? ¿Ves positivo que tanta gente en todo el mundo esté haciendo fotos a diario o esta inmensa cantidad de imágenes que se produce hará más difícil encontrar a quien tiene verdadero talento para ello?
Sí, es verdad que ha habido cambios enormes y ahora hasta es posible hacer buenas fotos con un teléfono móvil, pero las bases de la fotografía, saber enfocar, la composición, siguen siendo las mismas. Quizás el vídeo vaya ganando algo de terreno por lo sencillo que es hoy día hacerlo. Es posible que entre toda esta masiva producción haya gente de mucho talento no consiga tener relevancia, pero eso es algo que también ha sucedido con anterioridad.
